Naming y branding: técnicas para crear tu nombre de empresa
El primer producto que debe vender una empresa es ella misma. Es decir, debe conseguir que el público se vaya habituando a su imagen de marca y sepa reconocerla. Y no cabe duda que para alcanzar esta meta un nombre bien elegido es un buen punto de partida, de ahí la importancia del naming y el branding. Es muy común que se pueda confundir los términos de naming con branding por la estrecha relación que existe entre ambos, pero es momento de diferenciarlos bien, ya que realmente no son lo mismo. Así que, vamos a empezar definiendo qué es el naming, qué es el branding y sus diferencias.
Contenidos
¿Qué es el Naming?
Naming es todo el proceso creativo seguido para crear el nombre de empresa o de la marca. Puede parecer algo sencillo, pero realmente no lo es. El nombre que elijamos va a determinar una parte importante de la imagen que la empresa va a tener de cara al público.
¿Qué es Branding?
La otra pata de esta particular mesa que es el buscar el nombre perfecto para la empresa es el branding. Lo podemos definir como el proceso que se centra en la creación y la construcción de la marca.
Una vez que tenemos el nombre para la empresa es momento de crearle una identidad corporativa (un logo, unos colores, una tipología de letra, etc.) y un posicionamiento de marca, que es lo que los consumidores van a percibir de la marca (si es más juvenil o más seria, si apuesta por la sostenibilidad, si defiende valores como la igualdad, etc.).
Claves para un proceso de Naming de éxito
El nombre elegido debe ser único para que se pueda registrar, esto es algo básico a tener en cuenta. Pero además, debe ser fácil de escribir y de pronunciar para que el público lo recuerde más fácilmente.
Es mejor apostar por la brevedad y la coherencia, que el nombre se pueda identificar rápidamente con los productos o servicios que ofrece la marca. No debería evocar nunca asociaciones negativas.
Pero, por encima de todo, un nombre de empresa o marca bien elegido debe ser memorable y llamativo.
Ejemplos de Naming exitoso
Si lo piensas bien, seguro que conoces marcas o empresas con nombres que de una forma u otra consiguen hacer que destaquen frente al resto. Mira estos ejemplos:
- Pelostop: breve, sencillo, fácil de recordar y que a la vez nos permite identificar rápidamente a qué se dedica esta empresa especializada en depilación láser.
- Puterful: para hacerle la competencia a Mr. Wonderful y sus mensajes cargados de optimismo y unicornios, nada mejor que un nombre que ya nos advierte que en este caso nos vamos a encontrar justo con lo contrario.
- Ibiza, Altea, León…: SEAT siempre pone a sus modelos nombres de regiones españolas, lo que hace que el consumidor pueda identificar de forma inmediata sus coches. Si además tenemos en cuenta que SEAT es el acrónimo de Sociedad Española de Automóviles de Turismo, esto tiene todavía más sentido.
Seguro que conoces todas estas marcas y empresas que hemos mencionado. Ahora ya sabes que uno de los motivos por los que son tan populares es precisamente porque el éxito se ha empezado a fraguar desde el primer momento gracias a un buen proceso de naming y ha continuado con una buena gestión del branding de la marca.
Ejemplos de Naming desastroso
Aunque también existen casos de naming que no salieron del todo bien, más bien, salieron realmente mal. Solo podemos preguntarnos, ¿en qué estarían pensando?
- Extintores Palma Peña
- Restaurante L’Arcada
- Aroma de Berga
- HP WebOS
- Servicio de Hostelería Industrial de Terrassa (S.H.I.T)
- Restaurante Miano
- Tan Dao Vien
¿Qué, sorprendente no? Hay miles de ejemplos en Internet. Si quieres ver más ejemplos de naming desastrosos, puedes acceder al blog de Kirai.
Rafael Lucca – Especialista en SEO y Marketing Digital
Ayudo a empresas y profesionales a lograr sus objetivos en Internet.
Especialista en Posicionamiento Web y Marketing Digital en DXmedia.
Fan incondicional del comportamiento humano.
Mis debilidades: una buena conversación, la sencillez y el mar.